El secreto para hacer negocios con diferentes países se encuentra en comprender la
esencia, usos y costumbres de cada cultura y en reconocer las diferencias.

“La cultura es la programación colectiva de la mente que distingue a los miembros de un grupo o categoría de personas de otros.”
Gerard Hendrik Hofstede

Si los latinos en Estados Unidos formáramos una nación independiente, seríamos la quinta
economía del mundo. Generamos más de 2.8 billones de dólares al año, tenemos más de 4.7
millones de negocios con propietarios latinos y aportamos una fuerza laboral vibrante y
resiliente. Sin embargo, detrás de estas cifras hay historias de sacrificio, adaptación y, sobre todo,
determinación.

Yo también soy parte de ese espíritu. He tenido la oportunidad de trabajar con latinos que
transformaron pequeños negocios familiares en redes nacionales. ¿Su secreto? Pasión,
constancia y motivación. Tal como dice Rafael Álvarez, emprendedor latino en EE.UU. y fundador
de la Latino Franchise Association, “si tienes pasión por lo que haces, y si es algo que te motiva y
te gusta, no hay nada que te detenga”.

Muchos latinos llegan a este país con maletas llenas de sueños y miedos. Pero también con
habilidades, valores y una visión única para los negocios. He aprendido que el éxito de un
emprendedor migrante no solo depende de cuánto sepa de su negocio, sino de cuánto entienda
del nuevo entorno cultural donde está sembrando su proyecto.

La cultura sí importa
Iniciar un negocio en EE.UU. siendo latino implica más que traducir un menú o legalizar una
empresa. Implica adaptarse sin perder la esencia, entender la mentalidad local sin dejar de
honrar nuestras raíces. Como bien lo explica Hofstede, “la cultura es la programación colectiva de
la mente”. Si queremos negociar, liderar o expandirnos en un país distinto, debemos aprender a
leer los códigos culturales invisibles.

Un ejemplo: el mexicano puede pensar que mostrar emoción en una reunión demuestra
compromiso. El estadounidense podría verlo como falta de profesionalismo. En algunas culturas
el jefe da órdenes; en otras, las decisiones se toman por consenso. En EE.UU., “hacer” es el verbo
que predomina: hay que actuar, resolver, avanzar.

Convertir la diferencia en ventaja
El reto, entonces, no es imitar, sino comprender las reglas del juego y usarlas a tu favor. Ser
latino es una ventaja competitiva: sabemos adaptarnos, improvisar, crear comunidad y resolver
con pocos recursos. Somos resilientes por naturaleza, y eso nos convierte en líderes natos cuando
nos preparamos.

Como decía el ingeniero Lorenzo Servitje, fundador de Grupo Bimbo, “el emprendedor debe
aprovechar su inconformidad con lo establecido”. Esa inconformidad que sentimos al migrar
puede convertirse en la llama que nos empuje a innovar, a crecer, a dejar huella.

De migrantes a empresarios multiculturales
Si estás pensando en iniciar tu propio negocio en EE.UU., o ya lo hiciste y quieres llevarlo al
siguiente nivel, te invito a desarrollar un modelo de negocio que sea:
-Replicable: fácil de enseñar y de escalar.
-Comprensible: que respete el idioma, pero también las formas de pensar del cliente local.
-Humano: que se base en relaciones de confianza, no solo en transacciones.
Y sobre todo, que te represente. Que muestre de dónde vienes, pero también hacia dónde vas.

Recomendaciones para emprender sin perder tu identidad

1. Estudia la cultura local. No para cambiar quién eres, sino para entender mejor a tus
   clientes, proveedores y socios.
2. Lee libros como “Kiss, Bow or Shake Hands” o “El mapa cultural” de Erin Meyer. Te
   darán herramientas prácticas para trabajar con personas de diferentes orígenes.
3. Rodéate de otros latinos exitosos. La comunidad es un superpoder.
4. Invierte en formación continua. El conocimiento es el único equipaje que no pesa y no te
   pueden quitar.
   
   • Un llamado a creer en ti
     Tú no viniste a Estados Unidos a sobrevivir. Viniste a prosperar, a crecer, a inspirar. Como
     migrantes latinos, no somos víctimas del sistema. Somos parte esencial de su motor. Cada tienda,
     camión de comida, lavandería, franquicia o consultorio que abrimos es un acto de esperanza y
     una señal para los que vienen detrás.
     No olvides esto:
     Tu historia es tu ventaja.
     Tu cultura es tu fuerza.
     Tu acento es tu identidad.
     Y hoy más que nunca, tu voz tiene poder.

Espero que esta columna sea de utilidad para ti y para tu negocio. Recuerda visitar mi canal de
Youtube “FranchiseZar” donde encontrarás un gran acervo en temas de negocios, franquicias y
emprendimiento. Escúchame en el canal de FB de LA FORMULA DE LA FRANQUICIA todos los
miércoles a las 11:00 horas cdmx. ¿Interesado en adquirir una franquicia? Pregúntale a
FranchiseZar® y #notedejessoprender. Se despide de ustedes su amigo el Zar de las Franquicias,
nos vemos en la próxima.

Jorge Valencia L.
Presidente del Instituto Latinoamericano de la Franquicia.
CEO Grupo
Interfranquicias Latam.
Mejor conocido como el Zar de las Franquicias o FranchiseZar®️, 30 años en el
mundo de las franquicias y los negocios. Representante para Iberoamérica de
la Latino Franchise Association. Consultor especialista en franquicias
gastronómicas y cafeterías. Autor del libro ¿Realmente las franquicias son
garantía de éxito? Speaker internacional, con más de 500 conferencias,
talleres y seminarios en USA, México e Iberoamérica en temas de franquicias y
emprendimiento. Ha viajado por gran parte del mundo aprendiendo y
difundiendo el modelo de franquicia. Cuenta con la Certificación Certified
Franchise Excecutive en USA por la International Franchise Association (grado
de excelencia internacional en franchising). Maestría en franquicias en la
Universidad Nova de Miami. Master en finanzas y administración. Creador del
concepto La Fórmula de la Franquicia. Docente universitario. Conductor de
radio y TV. Viajero y lector incansable. Solo buen café mexicano. Mezcal para
compartir. Cinéfilo, sibarita, melómano, beatlemaniaco y 100% dallas Cowboy.